
Hasta última hora Adolfo Zaldívar intentó vetar a su hermano Andrés en el Ministerio del Interior, lo que puso en duda parte del diseño original del gabinete. Finalmente, Bachelet no cedió a la presión. En la plana mayor de los partidos generó sorpresa la marginación de algunas cartas seguras, como Sergio Bitar y Mario Marcel. Los distintos sectores de la DC no quedaron conformes con el equipo ministerial.
Paula Canales, Gloria Faúndez y Waldo Díaz
Paula Canales, Gloria Faúndez y Waldo Díaz
A las 21.05 horas de ayer, bajo el telón de fondo de una bandera chilena y sin la presencia de personeros del mundo político, Michelle Bachelet anunció a 20 de los 22 ministros que asumirán a partir del 11 de marzo próximo. De esta manera, la Presidenta electa concluyó una jornada marcada por la tensión, los ajustes en la marcha y la fuerte presión del presidente de la DC, Adolfo Zaldívar, quien vetó hasta última hora a su hermano Andrés para la cartera de Interior, lo que a media tarde hizo tambalear parte del diseño original de la ex candidata.
El anuncio de Bachelet estuvo marcado por el hermetismo hacia los partidos. A diferencia del Presidente Ricardo Lagos, quien informó la confección de su gabinete a los timoneles de la Concertación con 24 horas de antelación, la doctora PS los notificó minutos antes de dar a conocer su nómina. No lo hizo ella personalmente, sino a través de Alejandro Foxley, quien asumió ese rol para evitarle a Andrés Zaldívar que se contactara con su hermano Adolfo. El nuevo canciller fue convocado una hora antes al comando de General del Canto para llamar al PPD Víctor Barrueto, al radical José Antonio Gómez, al PS Camilo Escalona (Ricardo Núñez se encuentra en Grecia) y al senador "colorín".
A ese factor se sumó la perplejidad del oficialismo, que miró con incredulidad que la Presidenta marginara del gabinete al ex gerente general de su comando, Sergio Bitar (PPD), y al director de Presupuestos, Mario Marcel (PS), quien era una carta segura para Hacienda. Tampoco designó al timonel del PPD, Víctor Barrueto, lo cual generó fuerte malestar en ese partido, que no se siente representado con Ricardo Lagos Weber en la vocería de La Moneda (ver claves Pág. 5).
El veto que no fructificó
Tras señalar que su gabinete refleja un "nuevo estilo de gobierno", pues combina "caras nuevas con experiencia", Bachelet anunció que su ministro del Interior será el DC Andrés Zaldívar, el generalísimo de la segunda vuelta.
Esa designación fue justamente el punto más complejo de la negociación por la presión de Adolfo Zaldívar de imponer en la jefatura de gabinete a uno de sus hombres de confianza, Rafael Moreno. De hecho, en horas de la tarde el ex titular de la Cámara Alta estuvo a pasos de ser designado en la Secretaría General de la Presidencia, y en algún minuto Foxley sonó para Interior, quedando finalmente como canciller.
Los disidentes DC también quedaron golpeados con el anuncio, pues no fue nombrado ningún miembro de su núcleo histórico.
Aparte de Zaldívar, el comité político de La Moneda también estará integrado en la Secretaría General de Gobierno por Lagos Weber, hijo del Presidente Lagos y quien en un comienzo sonó como subsecretario de Comercio. La socialista Paulina Veloso estará a cargo de la Secretaría General de la Presidencia -ex almeydista, quien no adscribe a ninguna de las actuales tendencias internas- y en Hacienda entrará el economista Andrés Velasco. El PRSD estará representado por su vicepresidente, Isidro Solís (Justicia). Pese a ello, en esa colectividad resintieron haber perdido uno de los dos cupos que tuvieron con Lagos, aunque podrían verse beneficiados en caso de que a futuro Velasco fiche en las filas de radicalismo, del cual su padre, Ernesto Velasco, fue fundador.
Llamados personales
Bachelet llamó personalmente a sus nuevos secretarios de Estado a partir del domingo en la noche, cuando regresó desde Tunquén. Ayer en la mañana siguió contactando a algunos de los elegidos y a todos les pidió absoluta reserva. Esta llegó al punto de que algunos de los nominados les negaron a sus presidentes de partido haber sido llamados.
A las 10 horas de hoy Bachelet presentará a todo su equipo ministerial en la sede de su ex comando.
El anuncio de Bachelet estuvo marcado por el hermetismo hacia los partidos. A diferencia del Presidente Ricardo Lagos, quien informó la confección de su gabinete a los timoneles de la Concertación con 24 horas de antelación, la doctora PS los notificó minutos antes de dar a conocer su nómina. No lo hizo ella personalmente, sino a través de Alejandro Foxley, quien asumió ese rol para evitarle a Andrés Zaldívar que se contactara con su hermano Adolfo. El nuevo canciller fue convocado una hora antes al comando de General del Canto para llamar al PPD Víctor Barrueto, al radical José Antonio Gómez, al PS Camilo Escalona (Ricardo Núñez se encuentra en Grecia) y al senador "colorín".
A ese factor se sumó la perplejidad del oficialismo, que miró con incredulidad que la Presidenta marginara del gabinete al ex gerente general de su comando, Sergio Bitar (PPD), y al director de Presupuestos, Mario Marcel (PS), quien era una carta segura para Hacienda. Tampoco designó al timonel del PPD, Víctor Barrueto, lo cual generó fuerte malestar en ese partido, que no se siente representado con Ricardo Lagos Weber en la vocería de La Moneda (ver claves Pág. 5).
El veto que no fructificó
Tras señalar que su gabinete refleja un "nuevo estilo de gobierno", pues combina "caras nuevas con experiencia", Bachelet anunció que su ministro del Interior será el DC Andrés Zaldívar, el generalísimo de la segunda vuelta.
Esa designación fue justamente el punto más complejo de la negociación por la presión de Adolfo Zaldívar de imponer en la jefatura de gabinete a uno de sus hombres de confianza, Rafael Moreno. De hecho, en horas de la tarde el ex titular de la Cámara Alta estuvo a pasos de ser designado en la Secretaría General de la Presidencia, y en algún minuto Foxley sonó para Interior, quedando finalmente como canciller.
Los disidentes DC también quedaron golpeados con el anuncio, pues no fue nombrado ningún miembro de su núcleo histórico.
Aparte de Zaldívar, el comité político de La Moneda también estará integrado en la Secretaría General de Gobierno por Lagos Weber, hijo del Presidente Lagos y quien en un comienzo sonó como subsecretario de Comercio. La socialista Paulina Veloso estará a cargo de la Secretaría General de la Presidencia -ex almeydista, quien no adscribe a ninguna de las actuales tendencias internas- y en Hacienda entrará el economista Andrés Velasco. El PRSD estará representado por su vicepresidente, Isidro Solís (Justicia). Pese a ello, en esa colectividad resintieron haber perdido uno de los dos cupos que tuvieron con Lagos, aunque podrían verse beneficiados en caso de que a futuro Velasco fiche en las filas de radicalismo, del cual su padre, Ernesto Velasco, fue fundador.
Llamados personales
Bachelet llamó personalmente a sus nuevos secretarios de Estado a partir del domingo en la noche, cuando regresó desde Tunquén. Ayer en la mañana siguió contactando a algunos de los elegidos y a todos les pidió absoluta reserva. Esta llegó al punto de que algunos de los nominados les negaron a sus presidentes de partido haber sido llamados.
A las 10 horas de hoy Bachelet presentará a todo su equipo ministerial en la sede de su ex comando.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario